miércoles, 2 de noviembre de 2016

Hablamos de José Zorrilla

Ayer noche, primero de noviembre, tuvimos el placer de disfrutar en el Teatro Leal de La Laguna de la ya tradicional representación del Tenorio por la compañía Timaginas Teatro, así que, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid (nunca mejor dicho en este caso), hoy te queremos hablar de su autor, de José Zorrilla.
Imagen del poeta y dramaturgo vallisoletano
José Zorrilla y Moral nació en Valladolid el 21 de febrero de 1817 y su vida bien pudo ser la de alguno de los personajes de sus obras dramáticas. Sus padres eran Don José Zorrilla y Doña Nicomedes Moral, el primero era un hombre absolutista acérrimo, de fuerte carácter y firmes convicciones, que luchó en la Guerra de la Independencia (1808-1814), mientras que su madre era una mujer muy piadosa.
Durante los primeros años, el joven Zorrilla sigue a su familia por Burgos, Sevilla y finalmente Madrid, donde se instalan cuando el niño tiene nueve años. Ingresará en el Real Seminario de Nobles pero se mostrará como un alumno desaplicado y lector a escondidas de Chateaubriand, F. Cooper y Walter Scott. A los doce años comienza a escribir versos y a actuar en representaciones teatrales.
Las ideas políticas de José Zorrilla padre llevan a la familia al destierro cuando el gobierno de Cea Bermúdez gira hacia el liberalismo. Se instalarán primero en la pequeña localidad de Arroyo de Muñó, en Burgos, donde el joven Zorrilla conocerá su primer amor adolescente y poco después recalarán en Lerma.
Zorrilla es enviado a Toledo para estudiar leyes, una ciudad que le causará gran impresión y será protagonista de muchos de sus versos y dibujos. Pasa a continuación a la Universidad de Valladolid, donde llegó a matricularse de tercer curso, aunque siguió más dedicado a la literatura que al Derecho, devorando obras de Espronceda y Víctor Hugo. Todo esto llega a oídos de su padre, el fracaso en los estudios y la vida bohemia son circunstancias que su estricto progenitor no puede permitir, así que le insta a regresar a Lerma. Zorrilla desoye el ultimátum y marcha a Madrid convencido de triunfar, conseguir la gloria y vivir grandes amores.
A mediados de la década de 1830 comienza a colaborar en un periódico cuyos redactores terminaron perseguidos por la policía. Zorrilla logra huir y esconderse un tiempo, hasta que regresa a Madrid. Al día siguiente de su regreso, el 13 de septiembre de 1837 se suicida Mariano José de Larra, suceso que conmociona todo Madrid. Poco después, en el cementerio de Fuencarral, Zorrilla recitó algunos versos, como los que siguen:

Ese vago clamor que rasga el viento
es la voz funeral de una campana:
vano remedo del postrer lamento
de un cadáver sombrío y macilento
que en sucio polvo dormirá mañana.

Será el momento de su consagración, el nacimiento de un poeta y el inicio de los reconocimientos. Comienza a colaborar en El Porvenir y en El Español. Aparece el primer tomo de sus "Poesías" al que seguirán seis volúmenes más hasta 1840. De estos primeros volúmenes de poesías lo más conocido es la leyenda "A buen juez, mejor testigo", sobre el testimonio del Cristo de la Vega toledano, ante quien el capitán Iván de Vagas dio palabra de matrimonio a la joven Inés antes de seducirla. Su estilo corresponde al segundo romanticismo, también llamado romanticismo nacionalista (español), en el que son temas básicos la patria y la religión. De esta primera época data también su amistad con Espronceda.
En 1839 José Zorrilla, un joven de veintidós años, se casa con la viuda de origen irlandés Matilde O´Really, de treinta y ocho años. El matrimonio no será feliz, Matilde es una mujer extremadamente celosa y Plácida, la hija de ambos, morirá prematuramente.
Paralelamente a su obra poética se irá gestando su producción teatral. Ya en 1839, en colaboración con García Gutiérrez, estrena "Juan Dandolo", al que seguirán "El zapatero y el rey" (1840). Su apoteosis como dramaturgo son "El puñal del godo" (1843) y muy especialmente "Don Juan Tenorio" (28 de marzo de 1844), que aunque obtuvo primero un "éxito satisfactorio, no brillante" se convertirá con el tiempo en su obra más popular. También tenemos que mencionar la obra "Traidor, inconfeso y mártir" (1849).
Don Juan Tenorio y Doña Inés, en una representación del año 1922
En los década siguiente reside durante algunos años en París, pero se inicia un declive tanto en su obra dramática como poética, se confirma el fracaso de su matrimonio, proliferan las amantes y llegan las estrecheces económicas.  A finales de 1854 marchará a México, donde se ganará la vida al amparo del emperador Maximiliano. Regresa a España en 1866, se casa por segunda vez y se traslada a Barcelona. Consigue algunos subsidios que le permiten seguir escribiendo, pero siempre acuciado por las dificultades económicas.
El 1 de enero publica en El Liberal un poema titulado "1891-1893", en el que refleja un presentimiento, el de su muerte, que ocurrirá el 23 de enero de 1893 en Madrid.

Aprovechamos para recordarte que si quieres conocer un poco más la obra de José Zorrilla, tienes una oportunidad genial el próximo sábado en el Teatro Leal, donde Timaginas Teatro volverá a representar "Don Juan Tenorio". Podrás conocer a los galanes y temerarios Don Juan Tenorio y Don Luis Mejía, a la piadosa y devota Doña Inés, a la pícara Brígida, al ultrajado comendador Don Gonzalo de Ulloa y al simpático Marcos Ciutti entre muchos otros interesantes personajes, representados por un buen elenco de actores.

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